El Kimchi es el plato estrella de Corea del Sur, de hecho es bastante fácil de hacer, y puedes cocinarlo de la manera más tradicional o en distintas variantes.
Cuando viajas a Corea problabemente te den un poquito de Kimchi para acompañar tus platos, es algo tan común como el pan en España o el arroz en Japón.
De hecho, su popularidad es tal que incluso puedes reservar clases de cocina para Kimchi en Seúl, aprendiendo así de primera mano y con grandes expertos en la materia.
En este caso, os traemos la receta tradicional y fácil del Kimchi. Si nunca lo habías cocinado antes, es perfecto para ti.
¡Empezamos!

Ingredientes
- 10 tazas de agua
- 2 repollos, lavados y cortados en cuadrados de 2 cm
- 1 taza de sal gorda o sal marina
- 1 cucharada de ajo finamente picado
- 1 cucharada de jengibre picado
- 1/2 taza de kochukaru (polvo de pimienta de Corea, si no tienes no pasa nada)
- 2 cucharadas de azúcar
- 5 cebolletas cortadas en trozos de 1 cm
Nota: La salsa de pescado es opcional, siempre teniendo cuidado a la hora de añadirlo porque puede agregar mucha sal al Kimchi, y al final os quedará demasiado salado. Si lo agregáis a la receta, que no sea demasiado.
Pasos para cocinar el Kimchi
Después de reunir todos los ingredientes, es hora de pasar a la acción.
- Coge un recipiente o bol, preferiblemente de plástico o de madera, y mezcla la sal con el agua.
- Agregamos el repollo al agua salada. Intenta que todas las hojas queden sumergidas, y una vez comprobado, deja el repollo de 5 a 6 horas en el bol con el agua.
- Pasadas las horas, retira el repollo del agua y enjuaga las hojas con agua fría. Con tus manos, exprime el exceso del líquido del repollo.
- En otro bol a parte mezcla el ajo, el jengibre, el azúcar, las cebolletas y el polvo de pimienta. Si no tienes exactamente el Kochukaro no pasa nada, en cualquier supermercado hay pimienta en polvo y sirve igualmente.
- Por último, agrega el repollo al bol de la mezcla que hemos hecho previamente. Asegúrate de mezclar bien el repollo con la mezcla.
Después de realizar todos los pasos descritos anteriormente, coge un frasco hermético grande con tapa. Tendrás que meter la mezcla ya hecha con el repollo en el frasco y dejarlo fermentar de 2 a 3 días en un lugar fresco.
Después de que pasen los días recomendados podrás servirlo, pero cuantos más días pasen es mejor, por lo que lo normal es meterlo al frigorífico y comerlo una semana después.
Si te atreves a cocinar este tradicional y fácil Kimchi mándanos la foto de tu creación a nuestro Twitter, ¡estaremos encantadas de ver vuestros Kimchis caseros!
Además, puedes aprender más platos típicas coreanas con nosotras. ¡Que aproveche!